La educación es una piedra angular de nuestro futuro. Se calcula que en Ucrania 5,7 millones de niños en edad escolar se han visto afectados por la agresión injustificada de Rusia, y que miles de colegios e instalaciones escolares han sufrido daños. Para ellos, es fundamental poder acceder de forma segura al colegio, ya que les da un sentimiento de normalidad que es esencial para su bienestar y su futuro.

A pesar de la destrucción y los sacrificios que ha provocado la guerra, los ucranianos miran al futuro con confianza y esperanza. Y este futuro empieza por asegurarse de que se mantengan abiertos los colegios y de que los niños puedan asistir a clase. Dado que muchos centros escolares han resultado dañados, muchos niños tienen que recorrer distancias considerables para acudir a colegios alejados de sus hogares.

Para ayudarles, la Comisión Europea pide a entidades públicas y privadas de la UE y de fuera de ella que unan sus fuerzas y den muestras de solidaridad donando autobuses, que son esenciales para que los niños ucranianos vuelvan al colegio de forma segura.

¿Conoce alguna entidad pública o empresa privada que pudiera donar un autobús? Invíteles entonces a clicar en este enlace y a ver cómo pueden ayudar.